Hay ocasiones en que, cuando un niño o una niña nace, no sabes si realmente está bien a pesar de las pruebas porque hace falta saber, si ve, si oye, si tiene todo en su sitio, etc. Por eso, de las preocupaciones que tienen las madres, el hecho de saber si su bebé está bien, es lo más importante y lo que más les importa.
Pero, ¿cómo detectar si tiene algo que no va bien? En el caso del oído, hay algunas pautas que te pueden ayudar a saber si tiene un problema auditivo tu bebé, por ejemplo:
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Si a los 8-12 meses no balbuceo o, cuando hay ruidos familiares, no se gira para escucharlos o para mirarlos.
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Si entre los 24-30 meses no entiende órdenes sencillas (sin mirar).
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Si, a los 3 años, no puede localizar sonidos o bien repetir frases.
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Si, a los 4 años, no habla con frecuencia.
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Si, a los 5 años, le es imposible mantener una conversación.
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Si le cuesta concentrarse y tiene siempre una falta de atención por todo.
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Si tienes que llamarle la atención y repetirle las frases, a veces con contacto visual para que te haga caso.
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Si pone la televisión o la música demasiado alta.
Si ocurre todo esto estarás aunque un problema que conviene trates con un especialista porque, hoy día, hay muchas formas de tratar los problemas de audición, incluso desde la más tierna infancia. De hecho, seguro que recuerdas algún vídeo en el que los pequeños escuchan por primera vez la voz de su madre o los sonidos que les rodean.
