Las uñas de gel es algo que está llamando mucho la atención en las mujeres aunque no son para cualquier persona. De hecho, las mujeres que tienen las uñas quebradizas y que se les parten con facilidad no se recomienda su uso debido a cómo se deben poner (dejando la uña mucho más débil que antes).
Por eso, hoy te vamos a explicar cómo se aplican las uñas de gel para que, si quieres ponértelas, sepas cuál es el proceso que se va a seguir:
-
Lo primero será quitar el esmalte antiguo ya que ha de estar aplicado sobre las uñas limpias (de lo contrario las uñas de gel no llegarían a fijarse a la uña y eso haría que, al poco tiempo, se te cayesen).
-
Después se empujará hacia atrás las cutículas extendiendo un poco de aceite para cutículas y dejando en agua caliente unos minutos para que se resblandezcan y se pueda trabajar con ellas. Antes de continuar, las uñas han de estar secas.
-
A continuación se aplica una imprimación. Recuerda que las cutículas tienen que estar empujadas hacia atrás, sin que te hagas sangre, claro.
-
Ahora toca eliminar la capa superior de la uña, y el brillo que tienen. Para eso puedes hacerlo con una lima. Así las dejará apagadas y mucho más finitas que como las tienes.
-
Toca aplicar el gel. Se vuelve a echar una imprimación para eliminar cualquier tipo de humedad y se comienza con el gel, una capa delgada con movimientos largos y parejos. Hay que cubrir toda la uña y, cuando esté hecho, meterlo bajo una luz de secado ultravioleta entre 1-3 minutos. Una vez hecho se da una segunda capa y se coloca de nuevo bajo la luz pero 2-4 minutos. Tras una tercera capa, y 5 minutos de secado, estaría todo.
-
Hay que verificar que no hay bultos ni burbujas que puedan afear el aspecto de las uñas de gel. Ya lo único que queda es lavarte las manos con agua y jabón y limpiar las uñas (y ponerlas al tamaño que a ti te guste) para pintarlas.
Las uñas de gel hay que mantenerlas todos los meses y no es fácil acostumbrarse a ellas, por tanto, si no estás segura quizás debieras probar solo en una mano, o en unos dedos y ver si puedes tolerarlas antes de ponértelas para que no sufran todas las uñas.
En cualquier caso, elige siempre locales o especialistas que sepan lo que hacen al colocar las uñas de gel ya que, a veces, el proceso puede provocar dolor, por ejemplo con las cutículas o bien crear infecciones en las uñas que harían que se tuvieran que quitar de inmediato y sufrir un tiempo de tratamiento para curarlas.
¿Te pondrías uñas de gel? ¿O prefieres uñas de porcelana? Las uñas de porcelana también están de moda pero llegan a salir algo más caras y son más complicadas de mantener aunque, quien las lleva, dice que son mejores que las de gel. ¿Tú qué opinas?
