Cuando tienes un hijo es normal que le quieras dar todos los caprichos que quiere para tenerlo feliz, porque piensas que así será mejor, que así lo quieres más. Pero esto tiene un límite muy fino entre el querer bien y el consentir demasiado y, lo que uno no se da cuenta es que, al consentir demasiado, puedes estar criando un niño que no sabrá comportarse en el futuro. Es por eso que hoy te queremos hablar de cuáles son las consecuencias que hay de tener un bebé consentido.
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No sabrá valerse por sí mismo. Si todo se lo das hecho, el día que faltes, ¿qué va a pasar con tu bebé? Tienes que saber hacer las cosas por sí mismo y, aunque lo ayudes al principio, de lo que se trata es de educar para que sea independiente, no un anexo tuyo.
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No sabrá que conseguir las cosas requieren esfuerzos. Si nada más ver algo te lo pide y tú se lo compras no entenderá que para hacerlo has tenido que gastar, trabajar o sacrificar otra cosa para ello. Hay que enseñarle realmente lo que vale el comprarle lo que quiere y, a veces, no darle el capricho.
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Sabrá manipular a las personas. Eso si hay alguien que se quede a su lado porque un consentido lo único que quiere son personas que le den todo lo que él o ella quiere pero no dará nada a los demás pues piensa que todos están ahí para satisfacerlo.
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No sabrá relacionarse con otras personas. Ni compartir, ni la paciencia. Todo eso le costará un mundo.
